Pan integral casero | Receta fácil y sana

Claves para hacer un buen pan integral

Primero de todo, vamos a tratar de resumir 3 años de panes desastrosos en una serie de consejos, para que no cometáis nuestros errores, y vuestro pan integral quede perfecto a la primera.

1️⃣ Usa una buena harina integral

No todas las harinas integrales son iguales. Si puedes, usa una harina integral de calidad, preferiblemente molida en piedra. Algunas harinas comerciales tienen tanto salvado que absorben demasiada agua y dejan el pan denso y seco.

2️⃣ Ojo con la hidratación

El pan integral necesita más agua que el pan blanco. Un buen punto de partida es usar un 70-75% de hidratación (por cada 100 g de harina, 70-75 ml de agua). Si la masa está muy seca, el pan será un ladrillo.

3️⃣ Dale tiempo a la fermentación

El pan integral sube más lento que el pan blanco, así que no tengas prisa. Un buen levado lento (incluso en nevera durante la noche) mejora la textura y el sabor.

4️⃣ Usa poca levadura

El error más común es querer acelerar el proceso con más levadura. Error. Usa menos levadura y más tiempo. Para 500 g de harina, con 4-5 g de levadura seca o 10 g de fresca es suficiente.

5️⃣ Amasa bien, pero con cariño

El pan integral tiene menos gluten que el pan blanco, así que no necesita un amasado eterno. Un amasado corto, con reposos intermedios (autólisis o amasado francés), da mejores resultados.

6️⃣ No te olvides de la sal

La sal no solo da sabor, sino que regula la fermentación y refuerza la estructura del gluten. Para 500 g de harina, usa 8-10 g de sal (una cucharadita y media).

7️⃣ Dale un buen golpe de calor al principio

Para que la corteza quede crujiente y la miga bien cocida, hornea a alta temperatura los primeros minutos (200-220°C) y baja luego a 180-190°C. Añadir vapor en los primeros 10 minutos ayuda a que el pan suba mejor.

¿Cómo hacer pan integral casero? Nuestra receta

Aquí os dejamos nuestra súper receta de pan integral casero. Os hemos preparado dos «variantes». Una para los que no tenéis panificadora (y tenéis unos brazos fuertes) y otra para los que tenéis una maravillosa máquina de hacer pan.

¿Merece la pena tener una panificadora para hacer pan integral casero?

Definitivamente, sí. Si buscas la manera más fácil y cómoda de hacer pan integral casero, una panificadora te ahorrará tiempo y esfuerzo, asegurando siempre un buen resultado. Además, si te gusta experimentar, puedes hacer variaciones con harinas integrales, semillas o frutos secos sin preocuparte por los tiempos de levado o el amasado.

Si quieres preparar pan integral de forma tradicional, también puedes hacerlo a mano y hornearlo en el horno, pero hacer pan integral con panificadora, es mucho más sencillo y apto para cualquiera, incluso si nunca has hecho pan en casa.

Obviamente, también depende del uso que le vayas a dar. Si vas a hacer pan muy de vez en cuando, no te merece la pena. Sin embargo, lo que nos pasó a nosotros la comprar nuestra primera panificadora fue que, una vez con ella en casa, empezamos a hacer pan casero todos los días, fuimos probando muchas panificadoras, y aquí nos véis, con una página web contando nuestra experiencia.

De todas formas, si os apetece echar un vistazo, tras probarlas todas, tenemos un artículo con las mejores panificadoras.

Las mejores panificadoras para hacer pan integral casero

De todas formas, si no te apetece leerte nuestro artículo (aunque somos muy entretenidos de leer), te dejamos aquí debajo las 3 mejores máquinas para hacer pan integral, para que no pierdas ni un minuto.

¿Quieres ir un paso más allá? Haz tu propia harina

Si ya eres un panadero experto que me das mil vueltas y quieres que tu receta de pan integral casero pase al siguiente nivel, tienes la opción de moler tu propia harina en casa. Sí, se que suena a locura, pero hay unas máquinas que aunque no son baratas, dan unos resultados espectaculares. Se llaman molinos de hacer harina, y tras varios años probando varios, he ido preparando artículos con los mejores. Haz clic en las imágenes.